Conoce qué es el renting flexible y qué medidas deberán instaurar las empresas en materia de transporte según la nueva ley de movilidad sostenible de 2023.
Durante este año se espera que la movilidad en España de un paso agigantado hacia el futuro. En 2023 se aprobará la nueva Ley de Movilidad Sostenibilidad para dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos y a los retos del siglo XXI. Una norma que pretende promover una movilidad limpia y saludable entendida como un derecho social, que apuesta por impulsar la digitalización y la innovación dentro del sector. Os contamos las claves.
Por qué es tan necesaria la nueva Ley de Movilidad Sostenible de 2023
Promover una movilidad eléctrica, más limpia y respetuosa con el medio ambiente y la salud de las personas es uno de los objetivos principales de la nueva Ley de Movilidad Sostenible. No en vano, en nuestro país el 27 % de las emisiones de gases de efecto invernadero proceden del transporte, cinco puntos más que la media europea.
Un nuevo marco normativo que promueva un sistema de transportes más eficiente y sostenible, -que dé protagonismo a la movilidad eléctrica, el transporte público u otras formas no contaminantes- es indispensable para proteger el medio ambiente y mejorar la calidad del aire.
Puedes consultar aquí el texto del anteproyecto de la Ley de Movilidad Sostenible 2023.
“En nuestro país el 27 % de las emisiones de gases de efecto invernadero proceden del transporte”
La nueva Ley de Movilidad Sostenible 2023 pone el foco en el transporte eléctrico para ir al trabajo
La ley hace hincapié en la descarbonización del transporte y busca reforzar el papel de las zonas de bajas emisiones que se regulan en la Ley de Cambio Climático y Transición Energética y que acaban de entrar en funcionamiento en toda España con la llegada de 2023. Las localidades que tengan más de 50.000 habitantes deberán contar con estas zonas, lo que suma un total de 149 municipios.
Estas restricciones, que afectan sobre todo a núcleos urbanos, implican directamente a los trabajadores o empresas que desarrollan su actividad en estas zonas. Según la nueva ley, las empresas con más de 500 empleados deberán elaborar planes de movilidad sostenible para sus empleados.
Para cumplir con esta la ley de movilidad sostenible de 2023, las compañías afectadas podrán optar por distintas iniciativas, entre ellas potenciar la movilidad compartida o eléctrica de sus empleados, apostar por el transporte colectivo para los mismos o, en última instancia, flexibilizar los horarios de entrada y salida en el empleo presencial, así como incrementar el teletrabajo.
El renting flexible es una de las alternativas destacadas dentro de las medidas. La nueva ley pretende dar acceso al público a vehículos eléctricos, puesto que estos sí tienen permitido circular por las zonas urbanas con restricciones de emisiones. El concepto de renting flexible es una modalidad de renting en la que el titular puede tomar la decisión de rescindir el contrato sin que ello suponga una penalización económica. Es decir, puedes disfrutar de los servicios y ventajas de conducir un coche eléctrico sin necesidad de realizar un desembolso económico inicial, ni estar condicionado por permanencias o penalizaciones por cancelación.
La movilidad como derecho y la innovación como el camino, ¿qué otras novedades nos trae la ley?
La Ley se estructura en cuatro grandes pilares: la movilidad como derecho, hacer frente al reto de la emergencia climática, mejorar la calidad de las decisiones de inversión y gasto y la digitalización y apoyo a la innovación.
Para lograrlo, la movilidad deberá ser accesible e inclusiva y ofrecer soluciones para todas las personas de tal manera que las administraciones deberán trabajar de forma coordinada para garantizar este derecho.
La digitalización es otra de las claves de la nueva ley de movilidad del 2023 ya que incluye la creación del Espacio Integrado de Datos de Movilidad (EDIM), donde empresas de transporte, gestores de infraestructura y administraciones compartirán sus datos. El objetivo de esta iniciativa es optimizar la toma de decisiones relacionadas con las necesidades de movilidad en base al análisis de la información, con el fin de adaptarse a las necesidades reales de los ciudadanos..
La seguridad vial también ocupa un espacio en la ley. Se prevé la introducción de formación desde la etapa escolar, con contenidos de educación vial, convivencia y uso de todos los modos de transporte y movilidad sostenible de forma segura, hasta la formación profesional o universidad.
De esta forma, la futura ley constituirá el marco normativo que permitirá responder mejor a las necesidades de los ciudadanos y a los retos del siglo XXI: la sostenibilidad, la digitalización y la cohesión social y territorial.