¿Quieres conocer los tipos de recarga que existen? ¿O te echa para atrás la idea de pasarte a la movilidad sostenible porque no sabes cómo cargar un coche eléctrico? Te lo resolvemos en este artículo.

Un vehículo que funciona con electricidad y que emite cero emisiones al circular parece traducirse en un medio de transporte complejo, pero nada más lejos de la realidad. Gracias a los avances tecnológicos, cómo cargar un coche eléctrico es más sencillo que cualquier otro medio de transporte.

Este artículo trata sobre los tipos, el modo y recomendaciones de carga. Si has llegado aquí buscando si es mejor en casa, en la calle o en un parking, te recomendamos leer el artículo en el que Muévete en Verde explica dónde cargar tu coche eléctrico. ¿Arrancamos?

Primero, asegúrate de preguntar al vendedor o fabricante

Nos han llegado unas cuantas opiniones acerca de lo difícil que es, a la primera, abrir la conexión a la batería (lo que correspondería al depósito de combustible en los vehículos de diésel o gasolina).

No hay una norma específica para todos los modelos, por lo que nuestro mejor consejo es que, cuando adquieras un vehículo de estas características, pidas especificaciones e instrucciones a los responsables de venta. Luego es tan fácil como enchufar y esperar.

En cuanto a conectores, la gran mayoría de vehículos eléctricos utilizan IEC 62196 Conector Tipo 2 o SAE J1772 Conector Tipo 1. Tranquilo, los que encuentras en estaciones de carga suelen llevar adaptadores u ofrecer ambos modelos.

¿Cómo cargar un coche eléctrico? En un enchufe

Según el estándar de carga de un coche eléctrico (Electric Vehicle = EV), hay dos estándares de recarga que utilizan un conector diferente a la red. Utilizan el modelo Schuko, que se conecta directamente a un enchufe clásico, como hacemos con otros electrodomésticos.

En el estándar 1, solo hay un enchufe, un cable y tu coche. Nada más. Este modelo no es el más aconsejable porque la toma no está adaptada específicamente para cargar un vehículo eléctrico y puede provocar un fallo en la seguridad. Incluso comprometer la vida útil de la batería.

En el estándar 2, lo que se conoce comúnmente como carga lenta, se añade al modelo anterior un sistema de protección del cableado y un interruptor diferencial. Esto evita una mala conexión del coche a la red, ya que activa y desactiva la recarga. Sigue siendo poco aconsejable, debido a la misma razón que lo anterior.

Recomendamos utilizar este sistema solo en ocasiones de extrema necesidad. Además, dependiendo de la autonomía de la batería, puede tardar hasta 12 horas en realizar una carga completa (su potencia de carga eléctrica es de 3,7kw/hora, su intensidad no supera los 16 amperios).

¿Cómo cargar un coche eléctrico? En garaje, comunitario o particular

Gracias a la instalación de un punto de carga en nuestro garaje particular o comunitario, podemos cargar el EV en nuestra casa. En el estándar 3, específicamente fabricado para ello, la intensidad es de 32 a 63 amperios y la potencia normal es de entre 8 a 14 kW.

¿Esto qué significa? Que nuestro coche, en cinco o seis horas, realiza una carga completa. Es recomendable practicar la carga semirrápida en horario nocturno gracias a planes específicos para esto.  

Este modelo de puntos de recarga es mucho más seguro, rápido y fiable que los dos anteriores, además de suponer mayor ahorro en la factura de la luz. Recuerda que, para instalar un punto de recarga de estas características, solo debes avisar a tu comunidad de vecinos.

¿Cómo cargar un coche eléctrico? En parkings o estaciones de recarga

El modelo 3 anteriormente mencionado tiene dos tipos: intensidad monofásica e intensidad trifásica. La que hemos comentado para recargar en casa es la primera, pero la que encontramos en centros comerciales, parkings y otros aparcamientos de uso privado y público, es la segunda.

El tiempo de carga se reduce (entre dos y tres horas) y la potencia de carga es mayor (de 22 a 43 kW) mientras que la intensidad se mantiene (de 32 amperios a 64). Además, muchos espacios habilitan este servicio a sus clientes de forma gratuita.

Pero el modelo más habitual en la calle, gracias a las compañías que quieren potenciar la movilidad sostenible, es el estándar 4. Esta recarga, conocida como recarga rápida, es aquella que permite cargar el 80% de la batería de un EV en solo media hora. La pausa justa para tomarse un café.

La intensidad es hasta de 400 amperios, y la potencia máxima se eleva a más de 55 kW. Este modelo no es aún instalable en el hogar, debido a la infraestructura que requiere en la actualidad, pero es la mejor opción para viajes largos.

Entonces… ¿con cuál me quedo?

Con las dos últimas. El mayor problema que surge en estos casos es la gente que no tiene garaje o plaza de parking. Tampoco en el trabajo. Si esto es así, hay que aprovechar momentos como la compra, una salida de ocio o buscar una estación de carga para ceder media hora de nuestro tiempo a la movilidad sostenible.

Recuerda que, si aprendes cómo cargar un coche eléctrico de forma eficiente, salvas el planeta. Filosofía #smartmobility.